martes, 30 de julio de 2013

Benjamí Villoslada: Linchar no es delito


Esto se escribió en 2011:
A medida que aumenta el número de usuarios y lectores de Menéame se ha producido un aumento en comentarios y envíos -sobre todo de estos últimos- de datos personales con el objetivo de “linchar” o calumniar y desacreditar a personas sin pruebas.

Somos contrarios a los rituales del odio, y al aprovechamiento del anonimato de Internet para atacar a otras personas, menos aún cuando se dan datos personales de las mismas. Por esta razón, y para evitar que se convierta en una práctica habitual hemos puesto esa norma. Por favor, absteneros de poner datos privados en comentarios, pensad dos veces antes de enviar un apunte de un sitio o blog anónimo donde se acusan de hecho graves, o se divulga información personal de terceros.

Y esto en 2013:



En mi caso se cumplen todos los requisitos: datos personales, odio, acusaciones graves emitidas por un anónimo y ausencia total de pruebas que las respalde. Pese a ello la página que me difama ha sido difundida como noticia en tres ocasiones en Menéame, llegando en dos de ellas a portada. En lugar de inhabilitarse la cuenta del maleante (como prevé el propio reglamento de la página) se le ha dado público apoyo blandiendo grandes palabras con las que disimular la doblez y la mezquindad de esta forma de proceder.



"Internet tiene fuerza. Nadie intentará hacer callar sin que se le vuelva en contra". Apelar a la fuerza y a la exaltación ensordecedora e intimidante de las masas está en el manual de estilo de todo fascista.

Menéame no tiene normas, tiene cabecillas que, a veces, fingen ser magnánimos legisladores.

Villoslada ha contribuido a la noble tarea del sicofanta en ferviente solidaridad con los difamadores, secundándolos y emulándolos. Su abogada le dijo que era legal, aunque el Supremo discrepe de la experta. Y aunque en el blog de su empresa tilden de inmorales estas prácticas.

Sentar en el banquillo a estos tipos ya es una noticia suficientemente buena en cuanto a mi resarcimiento. Pero deben ser condenados para que el matonismo en el internet hispano cuente con un merecido escarmiento en su baluarte más visible.

2 comentarios: